Antes de poner el punto final a la novena edición, el Curso de Experto Universitario en Elaboración Artesanal de Helados ha vivido su actividad más intensa con las prácticas de los alumnos en el obrador de Carlos Arribas. Han sido 11 largas jornadas, del 30 de Enero al 10 de febrero, de 8 de la mañana a 19:30 de la tarde, desarrollando más de 130 recetas sobre papel y 70 helados entre todos los alumno.

En las prácticas se han repasado los fundamentos de formulación con el método de Arribas. El abanico de creaciones elaboradas en el obrador ha sido muy extenso, incorporando algunos de los temas de mayor actualidad, como sorbetes con fibra vegetal, sorbetes con proteínas de suero de leche y grasas vegetales, cremas heladas de frutos secos, helados de chocolate, diferentes tipos de helados de yogur, sin olvidarse de la familia de los helados de queso. También se trabajaron helados adaptados a las necesidades alimentarias especiales para ampliar las posibilidades de una heladería que no quiere dejar a ningún tipo de consumidor fuera de su alcance. Helados sin azúcar, para los veganos y leche vegetales tales como la de almendra, leche de arroz, entre otras, proteínas vegetales y otros helados experimentales.

Las practicas con la colaboración de importantes empresas proveedoras. Una de ellas ha sido Valtek, quien ha aportado una mantecadora de ultima generación, computerizada con doble sistema invertir, explica el propio Arribas. También merece especial mención la firma Elorri Comercial, que nos ha aportado coberturas de todas las clases de la casa Callebaut, comenta.

Al término de las sesiones, los alumnos mostraron su satisfacción por la entrega de Arribas en esta intensa formación. Lucia Cillero Cots, por ejemplo, argumento que cuando un curso se convierten memorable es responsabilidad del profesor. Carlos además de poseer un dominio total de la materia y unas grandes aptitudes pedagógicas, es increíblemente generoso. Generoso en su tiempo, con la trasmisión de sus conocimientos, sean estos objeto del curso o no, generoso con sus instalaciones, con el material didáctico….. No se guarda nada, no pasa de puntillas por el temario, profundiza. Disfruta con lo que hace y eso se traduce en una clase motivada. Otro de los alumnos, Rafael Ortega rueda, de la heladería La Cremería, de Jaen, destaco que el cuando llego al Curso con muchos miedos y finalizo con la valentía de enfrentarme a cualquier receta.